lunes, 2 de junio de 2014

Bajando por la calle

    Me pareció pertinente escribir lo que pensaba mientras bajaba por la calle de los faroles; no habían muchos edificios grandes, màs bien muchas casas viejas y por ser domingo estaba casi completamente vacío ese lugar; en la próxima intersección debía cruzar yo a la derecha.

    Ya estaba bajando la niebla y el cielo estaba blanco, era inutil mirar hacia arriba en busca de un rayo de sol o un trozo de noche oscura, pues caminaba justo en ese instante que no es luz ni oscuridad, ni tarde ni noche... 
 ...mi momento favorito.
   Es casi nostálgico este escenario, y más si se le suma aquel bolero que venía lejano casi indescifrable de una cuadra más adelante de mi cruce, uno de esos boleros viejos de tocadiscos que hacen junto a la penumbra de la jornada un pestañeo perfecto en tiempo y esencia.

                                                     además ...                 

Iba a verlo a él.